La importancia del cuidado y conservación del medio ambiente es fundamental para la protección de los ecosistemas como los humedales.
SEO/BirdLife hace un llamamiento reclamando para este 2023 la realización de un inventario completo sobre las zonas húmedas de España ya que aún quedan algunas autonomías sin aportar datos.
La organización también reclama que se declare a algunas lagunas costeras como zonas con un hábitat en peligro de desaparición. Estas son las de Doñana en la provincia de Huelva, el Delta del Ebro, el Mar Menor y L’Albufera de Valencia.
Estas tareas deben ser realizadas por las distintas administraciones públicas desde 2007 por lo que tienen entre sus deberes esa obligación vital para poner en conocimiento un problema que atañe a todo el mundo ya que el futuro de la biodiversidad está en juego.
La conservación de los humedales como estrategia para combatir el cambio climático es clave para salvar la vida tal y como se entiende. La contaminación y el cambio climático son dos problemas en clave de SOS para la sociedad española y, a su vez, para el resto de personas, animales y plantas de toda la Tierra.
Cada ser humano debe cuidar su entorno porque de ellos dependerá el avance global hacia la supervivencia del planeta.
Los humedales del mundo en modo SOS
La importancia de la conservación de los humedales para el medio ambiente es vital para la supervivencia de ciertos hábitats donde viven distintas especies de flora y fauna.
En los últimos años, los humedales han presentado una regresión importante que traducidos en cifras podemos decir, desgraciadamente, que casi un 90% de los humedales del mundo se han perdido o degradado.
Los humedales de España en peligro
El cambio climático y su impacto en los humedales también se ha hecho notar en España. De hecho, tomando como referencia los años 90 y contando 200 años antes de esta década del pasado siglo, se han perdido entre 280.000 y 500.000 hectáreas de superficie húmeda original.
Esto supone que la contaminación y el cambio climático se hayan sumado a otras adversidades que están cada día influyendo negativamente en los humedales y en la biodiversidad.
Algunos ejemplos de esta lacra medioambiental se manifiestan en emplazamientos como las Tablas de Daimiel y Doñana, ambas joyas de la biodiversidad del país.
Las administraciones públicas a examen
La lucha contra la contaminación en los humedales y su importancia para el medio ambiente debería ser un tema prioritario para las autoridades y para las propias administraciones públicas. La importancia de los humedales como fuentes de agua dulce y su protección es una cuestión tan relevante que debería estar a la cabeza en la agenda para resolver problemas medioambientales que están mermando la vida de estos emplazamientos de relevancia nacional e internacional.
Este problema debería estar en la agenda de las administraciones públicas ya que a pesar de ser conscientes de la problemática que engloba la desaparición de los humedales, su resolución o cuidado no está en las mesas de debate.
Las últimas legislaturas no han dado esa prioridad para conseguir el desarrollo sostenible y la conservación de los humedales aunque no todo está perdido en esta dura batalla medioambiental.
Plan Estratégico de Humedales a 2030: un halo de esperanza
El reciente aprobado Plan Estratégico de Humedales a 2030 por parte del Miteco, Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, sale a la luz tras más de dos décadas de que su plan antecesor se aprobara.
La biodiversidad en los humedales y su protección comenzará a ser toda una realidad con este plan que pretende ser más que estratégico. De hecho, la responsable de programas de Conservación de SEO/BirdLife, Ana Carricondo, hace hincapié en lo importante que puede llegar a ser este plan pero antes de comenzar con él, subraya la necesidad urgente de actualizar el inventario nacional de humedales.
Carricondo es bastante concisa con su intención de actualizar estos datos comentando que:
“a pesar de la importancia de disponer de una información completa y detallada de zonas húmedas, España no cuenta aún con un inventario nacional completo.
Solo hay ocho comunidades autónomas que han aportado sus datos. Este catálogo se creó en 2007 (con la Ley de Biodiversidad) y sigue sin ser definitivo porque las autonomías no han cumplido su compromiso. En la actualidad, el inventario recopila 764 sitios que ocupan una superficie de algo más de 235.000 ha, pero hay que completarlo para poder identificar humedales desecados o degradados.
Y avanzar así en su recuperación y restauración, tal y como promueve el Convenio Ramsar y recordando el reciente Día de los Humedales 2023, cuyo lema fue revitalizar y restaurar los humedales degradados”.
Según SEO/BirdLife el 35 % de los humedales de la Tierra ha desaparecido en los últimos 50 años y en España podría alcanzar incluso el 60% por lo que se trata de una necesidad de extrema urgencia.
La importancia de las lagunas costeras
La protección de los humedales frente a la eutrofización y la contaminación son un tema de urgencia que hay que resolver y evitar que la eutrofización avance de forma destructiva en algunas localización donde los humedales están perdiendo biodiversidad.
Las lagunas costeras como Doñana o el Mar Menor presentan un estado crítico de salud siendo emplazamientos de riqueza natural fundamental para la biodiversidad del país. SEO/BirdLife pidió el pasado 2020 la adopción de unas medidas que puedan ayudar a un desarrollo sostenible de estos humedales ya que el peligro que presentan es agonizante para las zonas afectadas.
Tras los datos aportados, SEO/BirdLife incluyó a las lagunas costeras como espacios de primer tipo de hábitat en peligro de desaparición en los que se incluyen los emplazamientos que se han nombrado al principio de este post.
Todas estas zonas representan un 90% del hábitat en España por lo que la importancia de los humedales para la regulación del clima y la biodiversidad debe ser tratada de inmediato y no dejar pasar más tiempo.
El catálogo Español de Hábitats en Peligro de Desaparición debe aprobarse de inmediato para que todas las administraciones públicas puedan trabajar coordinadas bajo una idea común: considerar a todos los humedales como ecosistemas críticos y su importancia para el medio ambiente.
